[FACEBOOK]     

2003-03-04

Pocahontas la Princesa Tica

PocaHontas existe. y Yo la vi.

Y en este caso en particular no son los pioneros ingleses que se enamoran de una bella india, son simplemente los güeros foráneos y, porque no decirlo, hispanos como nosotros, los que se ven prendidos por esta bella tica.
Si en aquella época a eso del año 1617, "Pocahontas, la princesa india" siempre se veía acompañada por un colibrí y un mapache, en este caso, hoy en día siempre se ve asediada por varones, varones que le ofrecen la mejor vida que nunca pudo haber soñado, toda la plata que ella pueda exigir, todo el cariño del Pacífico pero Pocahontas sin hacerles caso sigue de fiesta con sus amigas, una de ellas, la también ya narrada hermosa argentina de Mar del Plata, Laura. (Ver capítulo anterior ‘Puro Pacífico’).

Y en medio de la celebración Pocahontas sigue entregando lo más bonito de su corazón, esa mueca que desprende su jugosa boca, estoy hablando de su sonrisa. Pocahontas, de dónde viene esa sonrisa!

Entenderéis fácilmente porque Pocahontas significa traviesa, basta llegar al Mambo Bar y observarla detrás de la barra, ahí se exhibe, de 9 de la tarde a 3 de la mañana, 5 días a la semana, regalando esa mirada y sonrisa que incitan a consumir más cerveza, ron ó whisky por muy poco sediento que estemos simplemente con tal de verse otorgado por una de sus ojeadas.

Frente a esta intimidad escondida y expuesta, enfrente se encuentra Alesandro, cuyo contraste de actitud acrecienta la magia del Mambo Bar, Alesandro, que manera de descubrirse!

Alesandro, disk jockey oficial de la fiesta nocturna de Tamarindo, titulo honorífico!
Alesandro decidió venirse hace 5 años de Milano, dónde desde los 19 años su vida se ha visto envuelta por la música. Alesandro, de dónde sacas tan buena música!? esa que te ayuda a conseguir aquella mezcla explosiva de gringos, ticos, surfistas, rubias americanas, trigueñas, rastas, jugadores de pool, que se dan cita como cada día en el Mambo Bar después de un día de Puro Pacífico, esperando a encontrarse nuevamente con Pocahontas...
Miguel Habana.

No hay comentarios:

Publicar un comentario